Cayetana Guillén Cuervo se une a la Fundación Vicente Ferrer para pedir consenso en la protección de la infancia, a través de la publicación del Manifiesto "Promesas Pendientes", una declaración de principios para pedir “la unidad de toda la sociedad” en la protección y defensa de los derechos de las niñas y niños de todo el mundo.
La FVF sostiene que “existe una gran distancia entre los derechos reconocidos de la infancia y las graves situaciones de vulnerabilidad que atraviesan millones de niñas y niños en diferentes partes del mundo”. La Convención sobre los Derechos de los Niños, aprobada en 1989, y apoyada por todos los estados miembros se convirtió en el tratado más ratificado de la historia. “Este acuerdo considera a las niñas y los niños sujetos con plenos derechos, pero la realidad nos muestra un escenario desolador”, explica el manifiesto.
Más de 350 millones de menores sufren pobreza en el mundo, 1 de cada 4. Además, 148 millones de niños menores de 5 años sufren retraso del crecimiento debido a la desnutrición. En los últimos 20 años han muerto alrededor de 120.000 menores a causa de conflictos bélicos. Y 104 millones, 1 de cada 3, no van a la escuela en los países afectados por guerras o desastres naturales.
La organización recurre a una frase de la novelista y académica Ana María Matute: “La infancia no es una etapa de la vida. Es el mundo completo” al considerar que es un periodo clave que determina cómo se construyen las mujeres y los hombres del futuro. “La infancia encierra los cimientos del adulto que seremos, el modo en el que accedemos a las oportunidades que se nos presentan en la vida y la forma en la que afrontamos la vida misma”, señala el documento.
Para leer Promesas Pendientes, Manifiesto por la Infancia de la FVF: Manifiesto por la infancia (fundacionvicenteferrer.org)
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